Ay! mi blog querido precioso, ay! mi blog divino, ay mi cosica, que su mami está de vacas desconectada DE TODO y no tiene internet ni ná, ay que su mami no lo olvida, ay que te como, ay que le acabo de hacer una pedorreta a mi pantalla del ordenador másdivinoymáspresioso, ay que me has engordao, ¿tú no cariño?, pues la mami sí, que se está desquitando...
A partir de ahora las imágenes que os ponga no serán meros deseos buscados por la red, no, mis queridos lectores, a partir de ahora las imágenes serán realidades que han pasado por mi glotis, tranquilos, las imagenes las tomé antes de tragármelo...me parece que para septiembre Eli vuelve a mí cuerpo con más fuerza que nunca, ay que no tonta!!
El hecho de estar ociosa me permite analizar a la raza humana con más detenimiento, con la mente más virgen y menos viciada por el asqueroso estrés que nos turba nuestros pensamientos y obras (en esta ocasión no hay omisión).
De camino a la playa, cuando voy cargada de silla, bolsa, etc...veo todas la tardes un aquelarre, sí, habéis leído bien. Jugando al chinchón, tintadas de rubio, sentadas en la terracita de, supongo, la bruja mayor, se encuentran todas las tardes del señor un aquelarre de brujas jugadoras de cartas, que yo, cada vez que paso por delante, no tengo más remedio que ver (os lo juro que lo evitaría, pero me niego a cruzar de calle y andar por la solana en mi camino a la playa). Procuro ladear la cabeza al lado contrario, acelerar el paso y sólo mirar de reojo (por si se les escapa un conjuro poder esquivarlo) pero qué miedico que dan, no me gustaría ser presa de sus cotilleos.
Junto al aquelarre de brujas chinchoneras se encuentra la terracita de la señora que lee el Semana con su cabeza repleta de rulos. Esta imagen hace que me plantee un debate interno, si alguien es tan coqueta como para querer llevar su pelico arregladico, ¿por qué coño sale a la terraza con semejante facha?:
1. ¿porque no es lo suficientemente presumida y se lo hace?
2. ¿porque no tiene sentido del ridículo, ni se lo han presentado?
3. ¿porque ella en su casa (aunque esté en una terraza de una planta baja por la que pasa toda una urbanización entera para ir a la playa) va como le dice su instinto(ella no lo diría así)?
4. ¿porque es rebelde y la vida la ha hecho asín?
Lo asombroso es, que pases el día que pases SIEMPRE lleva los rulos, con lo que he llegado a la conclusión: para esta señora los rulos son como al hippy las rastas, como a Ana Rosa el cardado superior, como a mi Mari Tere las mechas, como al pino sus hojas, PERENNE, no se caen y siempre están igual.
Dos terracitas más cercanas a la playa, un matrimonio tranquilo, él lee la prensa diaria y ella hace unos crucigramas. Estos señores tienen el don del orden y de la decoración. Nos sorprenden a los viandantes playeros, con el colmo de la sofisticación, sí, decoran su terracita con un perrito de porcelana dejado de forma "casual" al pie del escalón, un chucho de cerámica que levanta su patita sonriéndote, con su lacito en la cabecica, con la lengüica sacada (que le da un toque más simpático si cabe) (el artesano que lo hizo se tuvo que tomar algo MUY fuerte antes de crearlo porque "eso" sobrio no lo haces...) A mis hijas les vuelve locas el perrito, y cada que vez que pasan se paran, durante unos minutos, que a mí se me antojan horas (¡por lo que me duele la vista! que mis sentidos sienten, sí, qué pasa?)
En fin, otro día describiré unas cuantas terracitas más, que son muy cañeras, y contarlo todo del tirón puede dejar en muy mal estado a uno, yo lo soporto a diario y aun así me ha salido callo en los ojos.
Nos sentimos en Babia.
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