Estoy en zona de pánico.
Estoy tan aterrada, tan acojonada y tan cansada que estoy empezando a temer, si ahora, que parece que todo está siguiendo la trabajada línea que me había marcado, merece la pena.
Aquí va la razón por la que no he publicado en una semana, a la que le he dado mil vueltas, porque no quiero ofender a nadie, porque esto no es más que un miedo más y mi anormal forma de afrontarlo...aquí va:
Creo que quiero ser maruja. Hala.
Sí, pero maruja de pro. Orgullosa de serlo, de gritarlo a los cuatro vientos, maruja-maruja, de rulo, escoba y hogareña voluntaria. Maruja no es una situación, estar en casa no te da esa virtud, maruja se nace y con el tiempo te formas. Es una actitud y una aptitud. No se crean ustedes que cualquiera sirve para el oficio.
Ser maruja es atemporal, puedes serlo con cuatro años, cuarenta e incluso ochenta. Maruja se lleva en el espíritu, en la carcajada con grito y en contar una información del tirón al punto del ahogo, con golpe en el pecho y guiño para aseverarlo.
Sí, quiero ser maruja porque yo lo valgo.
Y tener una casa decente, sin rincones con monstruos oscuros, sin cubos de ropa sucia, sin montones por planchar. Sí lo sé, no hace falta ser maruja para ello, pero a mí sí. Quiero ser de las que limpian y después remiran y suspiran para dar gusto a los ojos. Maruja que no tema al viento y que barra, la lará larita, en un bucle de hojas, escoba, polvo y viento, sin importarle un pimiento la pérdida del tiempo, porque si algo tiene ser ama de casa, es que tú eres tu jefa, el hogar tu lugar de trabajo y tu jornada son tus 24 horas, ¿habrá tiempo, pues, para malgastarlo en bucles de hojas??
Deseo ser la que levante a mis niñas, la que las vista y la que las peine, sí, si algo deseo en esta vida es poder peinar a mis hijas todas las mañanas. Porque yo no recojo del colegio a dos niñas, recojo a dos nidos de cigüeña con patas.
Todavía no sé la razón, supongo que será genética, pero la unión del género masculino y los coleteros es una utopía, una ilusión. A mí marido, la diadema, aunque sea de lentejuelas combinada con chándal, le salva la papeleta de las mañanas. Y no lo veo, pero me lo dice mi sexto sentido que las coloca con efecto "como caiga" en el mismo ascensor, sin pasar antes por cepillo.
Sí. Ay maruja, ese viaje de vuelta a casa, a tus quehaceres, a tu pausa café mientras escuchas noticias rosas porque esas son las que te dan vidilla...ay maruja, en ese impasse de lectura al sol mientras que cuecen las lentejas...ay maruja esos botones bien cosidos y esos ratitos para darte a la costura y al noble arte del DIY que tanto te gustaría practicar.
Sí, ya que sueño, me gustaría comer a la hora que el sol lo tengo justo encima, no cuando se va por las lomas y en tu interior vive un león que ruge.
Quiero poder estar en casa y controlar la fiebre de mis hijas, y dejarlas en cama sin moverlas porque están malitas, quiero tener derecho a estar enferma y pasearme en bata y zapatillas por casa, y si no hago nada ese día, pues no se hace y punto.
Deseo ser la que le abre la puerta al cartero, al revisor del agua y mantener una charla -coloquio con el técnico del ascensor sobre todo y sobre nada, ay, esos grandes temas.
Quiero disfrutar de un domingo, sin remordimientos, sin pensar lo que me queda por hacer cuando vuelva...quiero ser feliz...y en este punto de pánico, terror y estrés es cuando mi cerebro me da la solución mental exprés a todos mis males, ser maruja voluntaria.
Pues eso.
Muy bueno amiga, me ha encantado, ser maruja no es fácil, no está lo suficientemente valorado. Y desde luego tiene cosas, que son impagables.
ResponderEliminarSuerte, y ojalá lo consigas...te apoyo!!
Un besote
Lo malo es que no sirvo, lo sé...pero deseo ese tipo de cosas cuando el trabajo me ahoga...
EliminarBesos!!!
Asomándome desde lontananza, quiero decir... Óle, Óle y Olé!!! el simple hecho de planteártelo ya es de una valentía que quita el "sentio". Y entre esa vida dura y ajetreada que es la de maruja-vocacional, tendrá Ud. unos minutos extras sin restarlos a las horas de sueño y descanso para continuar deleitándonos con estas reflexiones que dejan al común de los mortales con muchas ganas de… “verte con rulos” jajajajajaja
ResponderEliminarUn besazo y mucha suerte en el empeño
Como me toque la primi me hago maruja...¿que no?.ahora tengo que empezar a jugar...
EliminarYo me apunto!!!! Tambien quiero ser maruja!!! Y alejarme de mi trabajo!!!! Si lo consigues cuentame como lo has hecho...
ResponderEliminarPues de momento para que lo haga realidad me tiene que tocar una loto...de otra forma lo veo poco probable, a no ser que una persona desinteresada y rica a la par decidiera pagarme un sueldo por escribir en el blog...que lo haría de mil amores (yo, claro), a post diario, oiga.
EliminarYo lo llevo diciendo muchos años, la revolución feminista es una mierda, nos han engañado vilmente con eso de que nosotras valemos mucho, y para todo, para trabajar dentro y fuera de casa, es un vil engaño.
ResponderEliminarBuen día.
Tienes tanta razón, tanta, que no voy a poner nada más que:
EliminarUn abrazo!!
Es que es verdad, luchando contracorriente todos estos años por tener un curro y no ser maruja como mi madre y resulta que ahora quiero serlo!!! Va a ser que una no era tan lista como pensaba…ánimo que lo conseguiremos!
ResponderEliminarEa, esta loca maternidad que nos trastoca las neuronas, las emociones y las prioridades.
EliminarUn besazo.
Me parece que somos muchas las que nos sumaríamos a tu deseo...
ResponderEliminarBesote marujil!
Menos mal, ya me estaba preocupando lo mío...
EliminarHola Yolandica ¿o debo empezar a llamarte Maruja? Te acabo de conocer y por aquí me quedo, no sé por qué pero creo que me divertiré... Besotes
ResponderEliminarPues eres bienvenida a este humilde blog...llámame como gustes ;)
Eliminarjajaja, a mi también me pasa a veces. Pero creo que la cara de pánico sería realmente la de la foto si fuera maruja la verdad. Porque ese sí que es un trabajo 24h y en el que ahora todo el mundo te dice "cómo es posible que no tengas la casa impoluta, todo maravilloso, cocines, y hagas todo de 10 si no tienes otra cosa que hacer?" a mi me da un telele.
ResponderEliminarY por si le resulta de alguna ayuda al marido :D http://blogs.elpais.com/mamas-papas/2013/01/curso-de-coletas-para-padres.html
Besos y respira hondo
Jajajjjaa, no lo había leído...tan sólo le pongo un pero a esos cursillos...¿curso avanzado? a ningún hombre que le guste una mujer se le da bien hacer coletas, A NINGUNO...el cursillo de ese nivel tendrían que cancelarlo, te lo digo yo.
Eliminar¡Hola Yolandica! Aquí una recién estrenada Maruja...acabo de quedarme en paro y estoy cuidando a mi peque de 30 meses. ¡Y no veas qué bien estoy! Eso sí, curro más que antes: de educadora, directora de hogar, ministra de economía doméstica...en fin, al menos veo a mi niño crecer sin correr para llegar a todo.
ResponderEliminar¡Me encanta tu blog! Sigo por aquí. ¡Y suerte con la primitiva!
Todo tiene su parte buena y su parte mala, no me alegro para nada que estés parada, pero como bien dices, podrás disfrutar de tu peque, no creo que NADA te compense más, independientemente de luchar por nuestros sueños y que tenemos que comer...en el bucle de lo que tenemos, debemos y nos gustaría hacer...veo lejos la conciliación, así que disfruta de tu peque. Un besazo y bienvenida ;)
EliminarJajaja. Ser maruja requiere de grandes dosis de preparación. ¿Hay oposiciones o algo? Yo, lo que quiero, es ser mujer florero (hasta rima) pero de momento me tengo que conformar o cambiarme a un churri con pasta pero pobrecico mi churri... A esto hay que añadirle que, para conseguir un churri con pasta seguramente tendría que rejuvenecer diez años. Mucho estrés. Besotes!!!
ResponderEliminarYo es que creo, que para estar parada en un jarrón no sirvo...pero puestos a desear...eso debe cansar poco :P
EliminarHolaaaa guapa!!!! Ay q razon q tienes,yo tambien quiero ser maruja,o tener el finde libre,ya ves lo poco que pido,dos dias para estar con mi familia,comer sin prisas hacer una siesta,vamos lo normal,pero me parece a mi q de momento,el marujo lo tiene q hacer mi marido,q esta en el paro,y la verdad es q se defiende muy bien,pero yo preferia que los dos tuvieramos curro,pero uno de esos en los q no hay horarios y tu seas tu propio jefe,vamos una utopia,como lo de la primi,q por no hacerla,seguro q no me toca.Bueno bonica,ya me iras contando,espero q lo consigas.Bsos
ResponderEliminarTengo ese mismo deseo cada vez con más frecuencia. Al principio lo vivía como una gracia, luego una utopía y ahora digo: por qué no????
ResponderEliminarBesos
Vaya vaya...pues mira...y yo que reivindico lo mismo y lo contrario...
ResponderEliminarEstar en casa es un lujo...eso no significa que sea "un lujazo"...
Siempre queremos lo que no tenemos.
Un besote desmadroso
Clap, clap, clap, aplauso -ovación, mancantao tu post. Y si puedes permitírtelo, adelante! Un abrazo.
ResponderEliminarMe uno a esta corriente de pensamiento que nos haría tan bien. Yo también quiero ser maruja,de mi casa me encargo yo...me encantaría!!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarMoaaggssf